Boeing y la Universidad de Arizona han demostrado a través de pruebas sin precedentes que los métodos de limpieza utilizados actualmente por las aerolíneas son efectivos contra el virus que causa el COVID-19. Las pruebas son parte de la Iniciativa de Viaje Seguro de Boeing que apoya a las aerolíneas y mejorar la seguridad y el bienestar de pasajeros y de las tripulaciones durante la pandemia del COVID-19.
Las pruebas han sido realizadas en un avión Boeing desocupado utilizando un virus vivo, de nombre MS2, en julio. El Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Arizona correlacionó estos resultados con el SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19, en un entorno de laboratorio protegido.
“Si bien estos métodos de limpieza han sido probados en otros entornos, un avión es diferente. Para nosotros, era fundamental evaluar y comprobar que los productos químicos y las técnicas que recomendamos para nuestros clientes sean eficaces y probados en la práctica”, dijo Mike Delaney, quien dirige los esfuerzos de Iniciativa de Viaje Seguro de Boeing. "Al trabajar con la Universidad de Arizona, pudimos emplear su experiencia de renombre mundial en virología para hacer exactamente lo que necesitábamos".
El virus Escherichia MS2 es seguro e inofensivo para los humanos y más difícil de matar que el SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19. El virus MS2 ha sido utilizado en estudios científicos y de la industria durante muchos años, pero nunca en la cabina de un avión. La Universidad de Arizona ha proporcionado el virus MS2 y ha analizado los resultados de las pruebas.
“Este estudio nos permitió probar y validar, por primera vez, que los métodos desinfectantes matan al SARS-CoV-2 en un avión”, dijo el microbiólogo de la Universidad de Arizona, Dr. Charles Gerba. “Es importante reconocer que no solo estamos hablando del SARS-CoV-2, sino también de otros virus y microorganismos. Me siento muy seguro de viajar con este tipo de estrategia de desinfección puesta en práctica”.
Se colocó el MS2 en puntos estratégicos de alto contacto en toda la cabina, incluyendo en las mesas de bandejas para la comida, los reposabrazos, los asientos, en los compartimentos de equipaje, en el interior del baño y de la cocina. Cada área ha sido desinfectada con diversos productos y tecnologías, y los desinfectantes químicos se aplicaron a través de dos medios: limpieza manual y con un pulverizador electrostático – un dispositivo que aplica la pulverización fina del desinfectante líquido. Las pruebas también midieron qué tan bien funcionaban la varilla ultravioleta de Boeing y los recubrimientos antimicrobianos – revestimientos duraderos que destruyen los gérmenes y virus en las superficies.
La Universidad de Arizona analizó cada área después de la desinfección para determinar su efectividad. Los resultados mostraron varios niveles de efectividad, pero en última instancia, todos los productos, métodos y tecnologías recomendados destruyeron con éxito el virus MS2.
Boeing y la Universidad de Arizona continúan probando los métodos de limpieza recomendados en un laboratorio utilizando el SARS-CoV-2 y otros virus similares para validar aún más su eficacia.
SEATTLE, 21 de octubre de 2020.- |